Al menos 99 personas murieron en Freetown, la capital de Sierra Leona, tras una explosión masiva al chocar un camión cisterna con otro vehículo la tarde del viernes.
El derramamiento de combustible y la posterior combustión resultó en un infierno que engulló a transeúntes y vehículos en una concurrida intersección de la ciudad de África occidental.
Algunas imágenes difundidas por medios locales mostraron cuerpos carbonizados en las calles alrededor del camión cisterna.
Julius Maada, presidente de Sierra Leona, dijo estar "profundamente perturbado por los trágicos incendios y la horrenda pérdida de vidas".
En un tuit, Maada dijo que haría "todo para apoyar a las familias afectadas".
Alrededor de 100 personas están siendo tratadas en hospitales y centros de salud en Freetown.
Se cree que la explosión ocurrió en un cruce fuera del concurrido supermercado Choithram en el suburbio densamente poblado de Wellington, en el este de la ciudad, en la noche del viernes.
Un reporte de la prensa local decía que un autobús se quemó por completo, mientras que las tiendas cercanas y los puestos del mercado quedaron atrapados en las llamas.
Brima Bureh Sesay, directora de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres de Sierra Leona, explicó que había muchos "cadáveres quemados".
"Es un accidente terrible", dijo a los medios locales.
