DE LÍDER SOCIAL AL PRESIDENTE DE LA ETERNA CAMPAÑA
Fue esta marcha el último distractor del presidente?
Quienes asistieron a la “mega” marcha de este domingo convocada por el mismísimo siempre marchista y provocador (antes de oposición) López Obrador, obviamente que fueron notados, empezando por la fila interminable de autobuses estacionados en las calles aledañas. Más que una marcha pareciera un operativo de estado (con minúscula). Porque el Estado, el verdadero Estado, se ha visto disminuido ante la concentración de poder en un solo hombre, que como en los tiempos antaños de la no dictadura-dictadura del mismísimo y viejo PRI, el presidente hacía lo que se le pegaba la gana. Porque el presidente (con minúscula) era el estado.
Más de lo mismo que se supone ya habíamos dejado atrás, pero hoy un pueblo bueno y sabio que con su peculiar y trillada respuesta de sus seguidores: “Pero ahora es diferente, por eso se salió del PRI, nuestro presidente si ve por su pueblo”. fueron a tapar el sol con un dedo y a defender lo indefendible de su mesías macuspano.
Si conocieran un poco más de historia guardada y enterrada en el saco de los olvidos o más bien de la AMNESIA o bien les hubiera sido contada, se darían cuenta que Morena no es más que una mala copia al carbón, de lo peor del priismo de antaño y lo peor aún está por venir cuando que se suponía haber quedado atrás.
Porque Morena no es el partido del pueblo, Morena es el partido del influyentismo extranjero dictatorial que hoy cunde, crece y abraza a America Latina y que empezó hace 50 años en Cuba.
Distinguidas personalidades como René Bejarano, Félix Salgado Macedonio, Gerardo Fernández Noroña, Napoleón Gómez Urrutia y Nestora Salgado estarán en la foto y el gran ausente: Ricardo Monreal, quien está en España para una reunión interparlamentaria y su inasistencia a la marcha le evitará la rechifla de los amantes del señor presidente.
LOS GRANDES AUSENTES:
- No asistieron los 760 mil muertos por la pandemia
- No asistieron más de 135 mil asesinados en lo que va del sexenio
-No asistieron las 13 mil mujeres asesinadas cruelmente.
-No asistieron los secuestrados ni los asesinados que no fueron liberados.
-No asistieron las madres de los niños con cáncer no los enfermos fallecidos por falta de medicamentos.
-No asistieron las madres de los desaparecidos
- No asistieron los grupos LGBTT.
-No asistieron las familias de los periodistas y activistas asesinados.
-No asistieron las organizaciones ambientalistas.
-No asistieron los que perdieron sus empleos o sus negocios por la falta de apoyo y mal manejo de los recursos de este gobierno, cuando si hubo y hay dinero para los acarreos, la compra de votos y las obras sexenales enterradas y mientas desde antes de nacer rodeadas de corrupción.
-No asistieron los mexicanos que pertenecían a la clase media y ahora son pobres, ni los que eran pobres y ahora son miserables.
-No asistieron al acto de presencia las madres solteras que traen atravesado al presidente desde que les quitó las estancias infantiles.
-No asistieron los EXbeneficiarios que tenía el Seguro Popular. Bueno, no asistirán ni los braveros maestros de la CNTE. Y todas esas ausencias se van a notar, por grande que sea la marcha.
@Un ciudadano lleno de hartazgo
EL VERDADERO RESULTADO DE LA MARCHA
Y a propósito, ¿de qué tamaño fue?
De acuerdo con la dirigencia de Morena sería cuatro veces más grande que la del domingo 13. Es decir, sería la madre, la abuela y las tías de todas las marchas.
Hayan ido los que hayan ido, lo UNiCO seguro es que esta marcha corporativa y clientelar donde participaron adultos mayores, Jóvenes Construyendo el Futuro, Servidores de la Nación, beneficiarios de programas sociales y miles y miles de acarreados de todo el paí, se reunieron o los reunieron con un solo fin: satisfacer el ego del presidente para borrarle la amargura que le provocaron unos fifís conservadores y reaccionarios que le echaron para abajo su Reforma Electoral.
Fue la marcha del orgullo herido y del desagravio, como aquella que le organizaron a Echeverría “las fuerzas vivas” del país después de la pedrada que le sorrajaron en la UNAM. Fue la marcha de apoyo al “mejor presidente que ha tenido México” pero sobre todo, fue para variar y lo único que ha hecho en 4 años y lo sabe hacer muy bien : Un gran distractor.
Aunque me temo lector que el distractor ya no le sirva de mucho; no en estos tiempos.
A Andrés Manuel lo rebasaron los problemas que tenía el país cuando llegó a la presidencia, pero también lo rebasaron los problemas que él mismo le ocasionó al país. La cancelación del NAIM para sustituirlo por una porquería, la construcción de una refinería que no refina y de un tren que no llevará a ningún lado son algunas de sus pifias.
Abusó del axioma “divide y vencerás” al grado que dividió al país, pero a la par y por sus pistolas se peleó con empresarios, maestros, estudiantes, mujeres, activistas, políticos y partidos políticos; médicos, enfermeras, sacerdotes, jueces y ministerios públicos; colaboradores que le fueron fieles, ex presidentes, la ONU, la OEA, la Comunidad Europea, periodistas y directores de medios.
Abrió muchos frentes y ahora no sabe qué hacer.
La marcha, por multitudinaria que haya sido, no tapará su fracaso como presidente porque no ha gobernado ni un solo día. Sigue en campaña desde el 1 de diciembre del 2018 mientras México sufre de desabasto, pobreza, miseria, inflación, carencia de empleo e inversión, y cada día se hunde más en un río de sangre por tanta violencia.
La marcha no fue una demostración de fuerza y mucho menos de unidad; fue un distractor más para evadir una realidad que está golpeando a millones de mexicanos y que no tarda en estallarle en la cara.
bernardogup@hotmail.com
