
Eduardo Clark aseguró que de mantenerse una tendencia alta de consumo de bebidas azucaradas, el sistema de Salud podría colapsar, por lo que significa brindar atención medica a los miles de casos de enfermedades crónicas.
En este sentido, con el incremento del 87 por ciento del IEPS a los refrescos, el gobierno prevé que durante el primer y segundo año con esta medida, el consumo caiga en un 7 por ciento.
Y se contará con 41 mil millones de pesos aproximadamente, que serán destinados en el sector Salud.