Por Manuel Díaz
En lo que se
puede interpretar como un acto de congruencia y responsabilidad política, el
candidato de Movimiento Ciudadano al gobierno de Sonora, Ricardo Bours puso la
muestra y renunció a sus aspiraciones para apoyar al candidato a la gubernatura
de la alianza PRI-PAN-PRD.
Si en algo se
distingue el partido de Dante Delgado, mercenario de la política mexicana por
excelencia, es que buscó, en su afán de “jalar” la mayor cantidad de votos
posibles, a un grupo de buenos candidatos. Sin embargo, la estrategia inicial
falló y, si bien le va a Movimiento Ciudadano, apenas logrará rescatar su
registro como partido nacional.
La caída en
picada de Morena no se detiene y a casi dos semanas de la jornada electoral,
las estrategias no están dando resultados, por lo que se comienzan a hacer
movimientos desesperados.
Falló el plan
de AMLO
Para empezar,
los partidos satélites de Morena de nueva creación, poco o nada suman a la
causa de su jefe máximo.
Ante esta
realidad, dan un giro y ahora buscan -momentánea y mediáticamente- separarse de
Morena y de AMLO. Pero al electorado le queda claro que la contienda es entre
dos grupos cada vez más marcados la Alianza Sí por México contra Morena y todos
sus satélites, sin embargo, la terrible selección de candidatos de Morena, sus
pobrísimas campañas y la caída dela popularidad del presidente por el fracaso
de su gestión, hacen que esos partidos intenten dar un giro para, por lo menos,
salvar su registro.
Ver hacia el
futuro
Si los
candidatos de Movimiento Ciudadano actuaran con honestidad y congruencia, este
sería el momento para separarse del partido de Dante Delgado y retirarse de la
contienda para sumar esfuerzos con la Alianza que hoy por hoy representa la mejor
opción para México. Lo dijo Bours al momento de renunciar se trata del respeto
a los ciudadanos que han confiado en Movimiento Ciudadano como una alternativa
y que es posible mantener los mejor de las dos opciones mediante un acuerdo que
sume y no divida.
Engañan con la
verdad
Redes Sociales
Progresistas (RSP) de la profesora Elba Esther Gordillo recientemente “tronó”
contra AMLO y el partido Encuentro Social (PES), el de los evangélicos, también
trata de desmarcarse, casualmente el mismo día que el RSP.
Ahora le
atribuyen a AMLO y a Morena el generar un ambiente de polarización social y
alejarse de los valores que los llevaron al triunfo en 2018.
El caso de
Movimiento Ciudadano
Desde que
decidió “ir solo” en las boletas, el Partido Movimiento Ciudadano (MC) de Dante
Delgado, trató de jugar la carta de ser la “tercera vía”, para ello colocó en
su lista de candidatos a hombres y mujeres con una imagen “fresca” en la
política y algunos personajes de renombre con buena reputación.
Pero el dueño
del movimiento naranja tiene una larga historia de cercanía y colaboración con
AMLO muy difícil de soslayar, aunque, al igual que los otros dos partidos en su
intento de “separarse” de la figura del presidente, en una carta señala que
López Obrador encarna a “la mafia del poder” e incluso critica su intervención
en el proceso electoral por estar “desesperado y aturdido” con la caída de
Morena.
Al renunciar a
la contienda por la gubernatura de Sonora, sin ni siquiera avisar a su partido,
el excandidato de Movimiento Ciudadano, Ricardo Bours hizo un llamado de unidad
en torno al candidato de la alianza PRI-PAN-PRD y momentos después, la
dirigencia del movimiento naranja emitió un comunicado en el que aclaran que no
“compartimos ni apoyamos” la posición expresada por Bours.
Otro caso que
ha llamado la atención es el de Nuevo León, donde el candidato de Movimiento
Ciudadano, Samuel García ha sido colocado por algunas encuestas como posible
ganador de la contienda a la gubernatura y en otras con un empate técnico con
el candidato del PRI, Adrián de la Garza. La candidata de Morena fue un fracaso
y desesperado, AMLO intervino en el proceso electoral en contra del candidato
priista para favorecer al candidato de Movimiento Ciudadano.
La estrategia
tuvo un efecto contrario y Dante Delgado decidió sacudirse el lastre que ahora
representa AMLO e intenta por todos los medios que a su candidato -el plan B de
la 4T- no lo vinculen con el inquilino de Palacio Nacional.
Sin embargo, la
vinculación entre Movimiento Ciudadano y AMLO no se puede tapar con un dedo y
aunque pretenda desligarse hay personajes cercanos a AMLO que fueron rescatados
por Dante Delgado y su franquicia, como el actual líder de la bancada de
Morena, Ricardo Monreal y Marcelo Ebrard, entre otros. Como partido político,
MC siempre ha jugado de la mano de AMLO desde las elecciones del 2000. Primero
en la “Alianza por México” con el PRD-PT-Convergencia Democrática que permitió
a AMLO llegar al gobierno de la CDMX y en 2006, con la alianza
PRD-PT-Convergencia, denominada “Coalición por el Bien de Todos”, y en 2012,
para la elección presidencial con la alianza “Movimiento Progresista”.
Ahora Dante
trata de “voltear la tortilla” al afirmar que “PRI y PAN son instituciones
claudicantes que en los momentos en que les truenan los dedos se disciplinan y
siempre apoyan y obedecen al inquilino de Palacio Nacional”.
Nadie puede
creer que AMLO y Dante Delgado no estén políticamente vinculados, lo de ellos
es simulación, hipocresía e intereses políticos. Está en manos de los candidatos
de Movimiento Ciudadano marcar la diferencia y en un acto de valentía y
responsabilidad demostrar que efectivamente quieren ser el contrapeso de un
gobierno ineficaz, autoritario y rapaz.
Renuncien.