Bruce Arians, entrenador en jefe de los Tampa Bay Buccaneers, dijo que apelará la multa de 50,000 dólares que le impuso la NFL por golpear en el casco a uno de sus jugadores durante el partido del domingo.

Arians dijo que estaba tratando de impedir que el safety Andrew Adams incurriera en un castigo por propinar tirones a otros jugadores, en un intento por evitar que siguieran amontonándose unos encima de otros cerca de la banca de Tampa Bay, que se impuso 31-15 sobre los Philadelphia Eagles en la ronda de comodines de la Conferencia Nacional.

El estratega golpeó en el casco de Adams con una mano tratando de alejarlo de los jugadores de los Eagles.

En el fondo de la montaña humana, Ross Cockrell de los Bucs, había recuperado el balón en un error de Philadelphia tras una patada de despeje. Ello dio el balón a los campeones defensores del Super Bowl en la yarda 48 del rival.

Cinco jugadas después, Tom Brady lanzó un pase de anotación de 2 yardas a Rob Gronkowski para poner el marcador 24-0 a favor de Tampa Bay.

Los Bucs recibirán a Los Angeles Rams en la ronda divisional de la NFC el domingo.

El día después del incidente, Arians dijo que no sentía que hubiera hecho algo malo.

“No, ya he visto suficientes estupideces. No puedes dar tirones a jugadores encimados” dijo el entrenador de 69 años. “Acabábamos de tener una jugada grande, gran posición de campo, y él estaba tratando de mover a los jugadores y yo lo quería alejar de ahí para que no le marcaran un castigo”.