
En el primer minuto de este miércoles entró de lleno en vigor el paro nacional de los trabajadores del Poder Judicial, al que llamó la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed), con el que 85% de los jueces y magistrados suspende labores y con ello audiencias, amparos, resoluciones y todo tipo de trámite en los juzgados, con excepción de casos especiales acordados.
Esta suspensión laboral, apoyada por mil 202 integrantes de la asociación de juzgadores, será por tiempo indefinido y mantendrá cerrados todos los juzgados del país, con algunas excepciones que la propia organización anunció.
Los tribunales seguirán atendiendo asuntos “urgentes”, como son aquellos en los que se pone en riesgo la vida o el bienestar de las personas. Para esto, los juzgados mantienen guardias.
La Jufed afirmó en un comunicado que “la suspensión tiene sustento en múltiples ordenamientos internacionales y nacionales, es legal y busca defender la independencia judicial”.